Mientras se disputaba el encuentro por la Copa Libertadores se escuchaban los estruendos por la represión policial.
En el marco de la crisis social que vive Colombia, Conmebol y las autoridades de Barranquilla decidieron que se dispute el partido entre River y Junior por la Copa Libertadores, y en las afueras del estadio se registraron graves incidentes entre manifestantes y la Policía.
Desde horas de la tarde se concentraron los manifestantes con la intención de suspender el encuentro. La Policía se hizo presente, intentó dispersarlos tirando gases lacrimógenos que afectaron a la delegación «millonaria», y luego directamente se enfrentaron con las personas que protestaban.
Según testigos, se trató de una batalla campal en las afueras del Romelio Martínez de Barranquilla. Incluso durante la transmisión del partido se pudieron escuchar los estruendos por los disparos efectuados por las fuerzas de seguridad.
Cuando recién comenzaba la protesta, y estaba en duda el partido entre Junior y River, Jaime Pumarejo, el alcalde de la ciudad, transmitió tranquilidad y aseguró que el partido iba a jugarse «con total normalidad».
«Hay garantías. Es un día de marchas en Colombia, pero la mayoría de ellas se hacen de manera pacífica. Barranquilla es un territorio de paz, donde nos podemos expresar libremente. Garantizamos las libertades de todos, del manifestante y del que no lo hace. Está todo preparado para que la gente no pueda mezclarse ni con los jugadores de Junior ni con los de River», aseguró Pumarejo en charla con TyC Sports.
Además, le bajó el tono a la protesta: «Ninguno de los sectores que se manifiesta va a interferir en el encuentro. Hacer un ‘plantón’ significa que se quieren juntar cerca del estadio para manifestar que no están de acuerdo con que se juegue un partido de fútbol en este momento. Tenemos varias anillos de seguridad y miembros de fuerzas públicas para que puedan manifestarse pero que haya fútbol”.
- Raro
- Asqueroso
- Divertido
- Interesante
- Emotivo
- Increible