“La jornada atiende a la situación de hambre que vivimos en el país por las políticas que quita el presidente asumido”, fundamentó a Elonce el delegado provincial de UTEP Evita desde las asambleas en barrio El Pozo.


“Si bien las políticas nacionales alimentarias llegaban a cuenta gotas, las ollas se sostienen por la voluntad de los vecinos y el sector nucleado en organizaciones sociales; hay una estigmatización en relación a todo esto, pero el miércoles vimos, en el cacerolazo, que la situación económica no solo toca a los humildes sino también a los empleados formales”, argumentó Rossi al remarcar: “Día a día se incrementan los platos por una necesidad en los barrios”.
Para el delegado provincial de UTEP Evita, “el DNU que lanzó el Presidente quitará muchísimas de las políticas vinculadas al acompañamiento al sector de alimentos”. “El municipio de Paraná acompañó con algunos alimentos secos, pero Provincia no dio cuenta y estamos a la espera de un llamado para trasladar esta situación generada a causa de una política ausente, que los barrios están necesitando”, indicó al respecto.

“La situación es apremiante y nos preocupa a todos”, fundamentó al dar cuenta de las situaciones represivas Buenos Aires. “Solo acompañamos la necesidad de manera organizada porque los mismos vecinos se van sumando poniendo un poco de harina y arroz para sostener el alimento de todos; esto es comunitario y participativo, y el Estado no se está haciendo presente”, cuestionó Rossi.
De acuerdo a lo que comentó, las ollas populares se replican en Santa Elena, La Paz, Concordia, Sauce Luna, Federal, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú.
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